Vagando por los alrededores *Christopher*

por **Alessandra Rochelle** Lun Ago 02, 2010 12:36 am

Despues de tantas cosas que me habian ocurrido la noche era larga... algo dentro de mi cambiaba sin detenerse, no podia hacer nada para volver a ser la de antes. El cielo estaba completamente oscuro y mi cabeza andaba en todos lados menos en su sitio, no sabia lo que me estaba ocurriendo, me sentia diferente, extraña, desesperada, estresada... todas las emociones humanas juntas... me sente en la banqueta pidiendo para que todo volviera a su estado original, me toque los labios recordando el sabor de la sangre de liebre en mi boca, al recordar como me saceaba la sed desee mas... mi garganta comenzo a quemar por las ganas de beber algo... pero no cualquier cosa se me antojaba... queria sangre... beber mucha sangre...

Un cuervo rompio el silencio de la noche al cruzar el cielo, mis nuevos ojos al parecer podian diferenciar el negro del ave al negro del infinito... cerca de donde me encontraba estaban cocinando, una rara combinacion de vegetales, pasteles, y condimentos... era demasiado para mi olfato sensitivo...

por **Christopher Black Crow** Lun Ago 02, 2010 1:02 am

Justo había salido de Cinnamon Square, la noche estaba despejada y la luna se encontraba en su máximo apogeo, bañando a todo el lugar con su perlada luz... algo fascinante a los que ponían verdadera atención a su entorno... las luces se volvían agradables y la fresca brisa acariciaba mi rostro de una forma sutil... suave...

Caminé pensando en lo que cocinaría hoy en casa, quizá una pizza para la cena no esté tan mal... aunque quizá con ello consienta demasiado a Mika. Le había comprado unos dulces a mi pequeña en la mañana, se los daría ahora, pero no creo que a Ina le guste demasiado la idea... pensándolo mejor, debía cuidar sus dientes, así que se los daría de a poco...

Saqué un caramelo de limón de la bolsita de dulces que tenía en el bolsillo de mi gabardina y me lo eché a la boca... delicioso... Una sonrisa se enmarcó en mi rostro, pero de inmediato se borró al percibir a una señorita con una clara angustia en el semblante. Me acerqué a ella, esperando poder ayudarla en algo... aunque no sabía si realmente necesitaba mi ayuda...

- Buenas noches... se encuentra bien? - pregunté con preocupación... tenía los ojos oscuros... y la sensualidad estaba impresa en cada uno de sus movimientos, por muy sutiles que éstos fueran... Me puse alerta...

por **Alessandra Rochelle** Lun Ago 02, 2010 1:22 am

No me di cuenta de que alguien se me habia acercado hasta que este ya estuvo delante de mi, debia de estar mas alerta, lo mire sonriendo, él no tenia la culpa de mis problemas, estaba acostumbrada a resolver mis problemas por mi cuenta o en su defecto mi hermano me ayudaba.

-Bonne nuit, digo... buenas noches- muchas veces olvidaba donde me encontraba, no estaba en mi pais natal- Muchas gracias pero si me encuentro bien- sabia disimular bien, mi educacion asi habia sido desde siempre, mi voz tenia un acento frances asi que aunque no se me hubiese salido las palabras en mi idioma natal me delataba, me levante tendiendole la mano- Mucho gusto, soy Alessandra Rochelle- algo en el hombre me hacia sentir bien, era como una paz perturbadora, no era natural sentirme asi delante de un extraño, se parecia mucho a estar en la presencia del Vagonero... en cuanto pense en él lo extrañe, suspire aun sonriendo.

-Es una nuit muy bonita- mire el cielo tratando de distraerme, y que el señor que tan amable se habia acercado no se viera perturbado por lo que ocurria dentro de mi cabeza

por **Christopher Black Crow** Miér Ago 04, 2010 2:58 am

Hice una mueca al escucharla sobre que estaba bien... se notaba que me lo ocultaba para no ser molestia o algo parecido, aun así sonreí para que no se diera cuenta. No le podía obligar a confiar en un desconocido y menos si ese desconocido se presentaba en medio de la noche. Su acento era Francés... no podía equivocarme... envolvía las palabras de un modo en el cual mis oídos querían seguir oyendo su voz...

- El placer es mío, señorita Rochelle, mi nombre es Christopher Black, pero usted puede llamarme como guste... - Qué fue eso?! Por qué dije esas palabras?! Miré el piso algo avergonzado y tensé la mandíbula para parar el deseo que sentía mi cuerpo de sentarme en la banca a su lado, de saber si su piel era tan suave como la luna me mostraba o era solo una ilusión... convertí mis manos en puños... yo no soy así, por qué siento esto?

Miro al firmamento perlado de estrellas para buscar algo de consuelo sobre estos nuevos pensamientos que cruzan por mi mente... - Sí... es una hermosa noche - susurré respirando el limpio aire que me envolvía... aun así no pude hace caso omiso a su perfume... mis sentidos se dispararon... Qué diantres me pasaba? Me tensé aun más y sentí como el caramelo de limón pasaba por mi garganta... tragué rápidamente para no atragantarme y la miré a los ojos tratando de averiguar qué era lo que me hacía poner de esta forma - Eres nueva en la Villa? - nunca la había visto y tenía muchísima curiosidad del por qué esta mujer me provocaba algo, que aun no distinguía con claridad y eso de no poder distinguir cómo me sentía no era una buena señal... Mis instintos me advirtieron que algo no iba bien, quedando alerta, aun tenso... en espera...

por **Alessandra Rochelle** Sáb Ago 07, 2010 8:07 pm

Mi rostro era una completa mascara de seriedad y elegancia, no podía decir lo mismo de él, pude observar que una ráfaga de sentimientos e ideas cruzaron por su cabeza, no pude deducir cual fue el motivo de su agitación interna, no lo conocía, a decir verdad no conocía a nadie de la Villa, pero siempre era bueno encontrarse con gente amable, y este ser… tenía algo notable, como una fuerza que salía de su cuerpo alcanzando todos los lugares más recónditos del alma.

-Señor Black, ¿sería tan amable de acompañarme aunque sea un momento? Y respondiendo a su pregunta creo que salta a primera vista que soy nueva por estos sitios- me hice a un lado permitiéndole que se sentara junto a mí, simplemente quería saber donde me encontraba y donde podía pasar la noche, me distraje un momento y la sed volvió a sentirse en mi garganta, demonios, pensé, donde podría conseguir más de la bebida prohibida… tenía que empezar a asegurarme una buena alimentación de mi propia mano, observe a mi alrededor sonriendo y olvidando por un momento mi perturbación anterior, me sentía tranquila, su presencia era un calmante natural para mi organismo.

De súbito el ambiente se volvió frio, un frio glacial, alce la mirada al cielo, las nubes se movían con suma rapidez, debía de haber vientos helados en lo alto del firmamento, en cierto momento la neblina se disolvió para dejar ver la Luna Llena, el paisaje se alumbro con la luz natural, mi Diosa me estaba diciendo que no estaba sola y que me estaría ayudando, le sonreí agradeciéndoselo de todo corazón.

-¿Sabe exactamente donde me encuentro?- era momento de ponerme a trabajar y saber cómo salir de este sitio que me ponía los pelos de punta, debía de haber alguna manera y estaba dispuesta a dar todo lo que tenía por volver con mi familia.

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