De vuelta a la Villa...

Johanna había tenido un muy bien viaje había conocido a gente muy agradable, gente rara, gente con la que nunca más hablo pero este no era el momento para balances ya era hora de regresar a su realidad y afrontar su realidad, realidad de la que siempre escapo por miedo a verse sola, amargada o quizás por miedo a reconocer que no amaba tanto su soledad y que necesitaba algo de cariño, o al menos una frase de apoyo.

Los días fuera de la villa le mostraron que su padre ya no volvería, que su madre era una loca sin corazón y que ella no tenía vida propia, por lo que al bajar del tren la vida de Johanna en la villa no volvería a ser igual.

El tren al fin se detuvo la noche era fría como la mayoría de las noches en la villa, Johanna bajaba con su equipaje, vestida con Jeans y una simple gabardina negra, el cabello castaño de Johanna volaba al viento frio de la villa.
Johanna bajo a paso tranquilo del tren no tenia apuro, pero por fin luego de tantos viajes lograba ver la realidad de su vida, este viaje le había mostrado que su padre ya no existía, que ya no debía vivir en memoria de glorias pasadas, ahora debía vivir para ella, tratar de recuperarse del abandono en la que estaba sumidad desde niña y claramente debía recobrar la alegría que desde niña le fue negada.

Johanna al fin ya estaba abajo del tren, con una extraña sensación en el estomago no sabía cuales cambios le esperarían, pero de repente todos sus pensamientos fueron acallados una extraña pero conocida neblina aparecía en escena, Johanna detuvo sus pasos quedándose quita en la estación.