Una loca noche de diversion [Doreen Conrad]

Despues de tomar algo en el hotel por no pasar la noche con el estomago vacio, subo a mi habitación y, tras ponerme “comoda” y tirarme un rato e la cama a terminar el libro que habia llevado conmigo, empiezo a notar una sensación de “ahogo”, una sensación de querer salir, una sensación de querer disfrutar de la noche. Por esto, de un salto me levanto de la cama, me doy una ducha y me pongo la ropa de “ir de caza”: pantalón de cuero negro bastante ajustado, camiseta negra sin mangas y cuello palabra de honor que se ajusta tanto como el pantalón a mi cuerpo, un cinto ancho blanco que cae ladeado sobre mi cintura y botas blancas de caña alta (la caña llega mas o menos por la mitad de la pantorrilla) y apenas con un poco de tacon. Ya fuera del hotel, abrocho mi cazadora de cuero negra, la cual tambien llevo puesta, y, despues de ponerme el casco, arranco la moto y pongo rumbo a la discoteca Dalia en el distrito fucsia porque alli ya se seguro que tendre lo que quiero esta noche, diversión, diversión y mas diversión.

Al llegar a la entrada de la discoteca, dejo estacionada justo delante la moto y, tras quitarme el casco para dejarlo en la moto y mover de un lado a otro mi cabeza rapidamente para soltar mi pelo, entro en la discoteca quitandome la cazadora y guiñandole sensualmente un ojo al portero mientras le regalo una de mis sonrisas mas sexys.

Una vez dentro y despues de dejar mi cazadora en el guardarropa, me dirijo a la barra frirpeando y dejandome querer de forma velada por todos los hombres que se quedan con su vista clavada en mi. Cuando llego a la barra, me siento con las piernas cruzadas de forma sensual y, arrimandome a la barra con los brazos apoyados en ella tapando un poco mi escote para que solo pueda intuir lo que hay debajo de el, le pido al camarero un ron con cola y me mantengo en esa posición mientras me lo sirve.

Tras pagarle y darle la gracias, me despido de el hasta la siguiente copa con un guiño y me dirijo hasta una esquina de la pista de baile donde me imagino que se me vera desde cualquier punto de la pista (al igual que yo vere a toda la gente que esta en ella) y enciendo un cigarro para irlo fumando mientras observo el “ganado” por si encuentro alguna “res” que este sin “propietaria” y que no este mal para pasar un buen rato solo esta noche.

Cuando termino el cigarro, todavía no he encontrado ninguna “res” que cumpla con mis “exigencias” asi que, como empiezo a estar un poco agobiada por no hacer nada mas que bebiendo apoyada a una columna, me voy con la copa a una tarima, me subo a ella, dejo la copa arrimada contra la pared y me pongo a bailar al ritmo de la musica para ver si con un poco de suerte alguno que cumpla mis “exigencias” se fija en mi.

Ya llevaba un rato bailando sobre la tarima cuando, al parar para coger la copa y mientras le daba un trago, veo entrar a una chica que con paso firme y rapido se dirige a la barra y pide una copa. Por la risa que llevaba, la forma de ir vestida y el guiño al camarero mientras de forma coqueta (y añado que con bastante buen gusto) le enseña la pierna cuando le servia su copa, intuyo que, de forma bastante probable, vino aquí exactamente por el mismo motivo que yo, es decir, a divertirse con unos bailes y copas mientras vuelve locos a los tios de su alrededor. El camarero definitivamente hoy debe de estar alucinando, primero yo y luego esta chica, vale, yo nunca me pondre un vestido (nunca en mi vida me puse uno, no pienso empezar ahora, cuestion de principios), sin embargo, no solo con vestidos somos sexys y deseables las mujeres, tambien podemos ser sexys y deseables con pantalones, solo hay que saber que pantalón poner y con que ponerlo y en este momento tambien me sentia sexy y deseable por los hombres de la “disco”.

Cuando compruebo que me observa y sonriendo me alza la copa en señal de saludo, cojo la mia y la saludo de la misma manera con una sonrisa totalmente sincera y como si hubieramos realizado un brindis en la distancia tomo el ultimo trago que me quedaba a su salud. Tras estar un poco mas sobre la tarima bailando, empiezo a tener ganas de otra copa y antes de bajar pienso: “¿Y por que no? Al fin y al cabo las dos estamos aquí para lo mismo y dos “leonas” “cazan” mejor que una. Venga Ruedas, ahora que vas a por otra copa aprovecha para conocer a esa chica y juntas hacer que mas de uno y mas de dos empiecen a soltar un poco de babita por la boca”. Y, tan pronto como lo pienso, me bajo de la tarima y, atravesando la pista con movimientos bastante “felinos” y sensuales aunque sutiles y elegantes, me acerco hasta el lugar de la barra en la que se encuentra la chica y, tras pedirle al camarero otro ron con cola (esta ves apoyandome de lado sobre la barra para que el camarero solo viera mi costado y tuviera que seguir imaginandose el resto a la vez que me sentaba cruzando las piernas de forma sutil ) y que este me lo trajera, le digo a la chica dandole un sorbo a mi nueva copa:

-Hola, ¿qué te parece si unimos nuestras fuerzas para hacer que todos los tios que estan en esta discoteca caigan rendidos a nuestros pies uno por uno? Antes de contestar ten en cuenta una cosa, dos pares de ojos vigilan mejor que solo un par, lo digo por si uno o varios de los hombres que caigan a nuestros pies tienen novias celosas y asesinas, que al menos una las vea venir y de el aviso a la otra para escapar antes de que nos acorralen para darnos hasta en el carnet de identidad por pretender quitarle los novios- y, tras terminar con una gran sonrisa, me presento para esperar por su respuesta mientras enciendo un cigarro: –Por cierto, me llamo Cristina pero si quieres puedes llamarme Cris o Ruedas, como prefieras.

En una cosa tenia razon, la ropa que llevo es la adecuada para ir de “caza”, aunque ella con su pequeño vestido fucsia bastante transparente (aunque con unos ojos “normales” no se si se vera algo en esta oscuridad), esas medias largas que estilizan, aun mas si cabe, sus piernas y termina con el pequeño gran detalle del “liguero”, la verdad, lo tiene mas “facil” que yo, seamos sinceras, a los hombres les pone mas una falda que unos pantalones, por muy sexy que vaya la mujer con unos pantalones, si a su lado esta una con un vestido y………..menudo vestido………la del vestido se los llevara de calle. –Bueno, tu tambien estas muy “explosiva”- le digo, y con una sonrisa sincera en la boca añado –Te propongo una apuesta. Empezamos a “tontear” con todo cuanto tio podamos y, quien al final de la noche haya “ligado” mas, tiene una copa pagada por la perdedora. ¿Aceptas el reto?

Cuando se presenta, me levanto tambien y le tomo la mano apretandosela en señal de confianza plena en ella y, mientras brindamos, respondo a su brindis guiñandole un ojo y diciendo –En la cual a mas de uno lo dejaremos calentito y con ganas de ir pronto para casa.- Tras esto bebo de un trago mi copa y le doy la ultima calada al cigarro antes de apagarlo.

Ante su pregunta, me siento mirando hacia la pista, realmente ya habia visto a mi primera “presa” desde que entrara: un morenazo con el pelo bastante corto y levantado en punta hacia la frente, con unos ojazos azul celeste que parecen tener la mirada melancolica e inocente de un niño, cejas pobladas aunque no en exceso y, lo que mas me mato de su cara angelical asi como de niño, su barba de dos dias que le da como un toque asi…..como mas casual y desaliñado y que le da ese toque varonil que de seguro todas deseamos que tenga nuestro hombre. Ademas iba vestido con unos pantalones vaqueros azules que le marcaban un culo bastante…..interesante, una camisa blanca bastante suelta con los primeros botones desabrochados dejando ver su pecho moreno (al mas puro estilo de cualquier cantante latino), sin un solo pelo y en el que se adivinan unos pectorales que, a pesar de que se marcan, tampoco se notan en exceso.

Tras asegurarme de que estaba sin la compañía de una mujer que pudiera ser su novia, pareja, esposa o cualquier otra femina susceptible de coger un enfado que pudiera provocar que Doreen y yo salieramos con algun que otro tiron de pelos, me levanto y le digo con una sonrisa seductora provocada ya solo por como hare que caiga en mis redes esa “presa”: -Si Doreen, ya se quien sera mi primera “victima”.- y le indico el lugar de la pista en la que se encuentra –Pero no me pienso mover de aquí hasta que no me indiques cual es tu “presa”. Aquí o ligamos las dos o no liga ninguna.- termino con una sonrisa mas que delatadora de mis intenciones y mirandola a los ojos en espera de que me indique quien sera su “presa” y asi salir las dos “leonas” juntas de caza.