Esto me recuerda a las Vegas ::Gérard Malakian::

Luego de un día de travesía por esta ciudad y entender que… no podría salir de aquí hasta que pasara un tren de vuelta ~ lo cual espero que ocurra pronto ~.
Decidí ver el lado bueno del asunto y ser un especie de turista en este lugar, que para ser una villa era bastante amplio.

Deje mis cosas en la habitación de hotel y solo con mi cámara fotográfica, cuidadosamente guardada en el bolsillo de mi gabardina gris, salí a caminar. No lograba entender como mantenían tantas bombillas prendidas ¡y sin cables!, creo que vi una vez en esos informeciales ampolletas que funcionaban sin electricidad… en fin. Opté por obviar eso y solo disfrutar de su belleza casi pirotécnica comparada con ciudades tan ruidosas como Tokio, Hong Kong, New York y.. ¡claro!, el punto mas luminoso de la tierra… Las Vegas.

Estaba en eso cuando espaldas a mi casi como una epifanía aparece esa mujer… ~ como se llamaba? ~… en fin.
- que no mire hacia acá… que no lo haga…-
Masculle para mi fuero interno, pero al parecer ese documental del secreto estaba erróneo, pues lo primero que hizo fue voltear y verme.

Alce por acto reflejo el mentón como gesto de saludo y me acerque a ella.
~ y que le iba a decir?... “uy que rica tu sangre”… nah!~ debía ingeniármelas de que ella de primera instancia que no huyera de mi, 2º que me dijera todo lo que sabe y 3º ya sabes… el tiempo extra... ¿he?, dioos en las cosas que pienso ahora… aunque me conformaría con una pequeña dosis de su sangre ~ si sigo así capas que me pegue algo… ~

- hola… no esperaba encontrarte… nuevamente-

Y a pesar de todas mis fatalistas predicciones de cómo iba actuar la mujer y que poco menos tendría que amenazarla para que hablara… todo se dio bastante bien.
Sonreí ampliamente con reflejando confianza y picardía.

- bueno con tanta luz es imposible no pensar que en este lugar no haya vida nocturna…-
Ya mas cerca de ella, ladee levemente mi rostro hacia un lado fijándome en los detalles de su rostro… digno de ser retratado en la inmortalidad que ofrece una fotografía.

-Gérard…Gérard Malakian… que mala menoría tiene…-
Agregue divertido ampliando mi sonrisa acentuando la marca en mi rostro.
-y si, ya estoy mejor gracias por la preocupación…-
Entorne los ojos y la acompañe hacia el local que apunto, manteniéndome en silencio concentrado en su andar aunque la observaba casi imperceptiblemente.

“¿Le gustaría beber algo?”
Pregunto y le ofrecí mi brazo para … ya sabes… afianzar los lazos ~ seh, seh, seh~
-…a ti-
Respondí seriamente mirándola de forma retadora, para luego lanzar una risa honda al aire alzando mi mentón.
-jajajaj, es broma… mmm… no se me antoja enjugo de mandarinas…-

Bueno, comenzamos con el pie izquierdo pero… ¿quien dice que las cosas no pueden mejorar?. Y como muchas veces en mi vida, la gente solía confiar en mi de buenas a primera, aunque en este caso… luego de la violación que cometí a su brazo reacciona bastante bien ~ ahhh… si de seguro también le gusto ajajajaj!!!~. Ahogue la risa por mi pensamiento, en mi garganta antes de que saliera al exterior y volví la vista a la mujer… Eve.

-lo del popote no suena mal, pero prefiero usar los medios tradicionales-

~Uy si con eso doy mucha confianza… vamos dame un 360…!!!~
-si, siempre me han gustado las mandarinas… es casi como una herencia familiar. Por cierto… quería disculparme por mi comportamiento la otra noche… pero…-
Sonreí ampliamente soltando su brazo para caminar de espalda observándola a ella a medida que avanzábamos por el local.

Puse una mano a la altura de mi corazón, y la libre la alce mostrando la palma de la mano como si jurara algo.
-prometo no volver hacerlo… no sin autorización…-
Sonreí con picardía y volvía al lado de ella ~ interrógala, interrógala!!!~.
Tome asiento en un taburete de la barra y la invite a que se sentara a mi lado.
- por cierto, hace cuanto que estas aquí?...-