El señor del Sombrero

Datos Personales:

-Nombre y apellidos del personaje: D. Wickham Mecier Jr.

-Sobrenombre: Pan Wickham / El señor del sombrero.

-Raza: Humano /Caucásico.

-Edad: 33

-Actividad: Economista de gran reputación en parís

-Nacionalidad: Francés

-Orientación sexual: Heterosexual.

-Estado civil: Casado.

Descripción física y psicológica:

-Descripción física: Es un hombre bastante alto, llegando al metro noventa y de cuerpo atlético. Cabello castaño claro, ojos avellana. Su apariencia es impecable, bastante apuesto. Nunca lo verán descuidado o desalineado. Comúnmente usa trajes finos y zapatos de vestir italianos y un sombrero de ala ancha. Siempre lleva consigo un bastón con una cabeza de un león, una pipa de ébano y un pañuelo de color azul.

-Descripción psicológica: Es un hombre centrado y educado. Sigue las leyes y el respeto. Es un manipulador y mentiroso compulsivo y esto lo ha perfeccionad con el tiempo. Le encanta el adulterio aunque no lo aparente. Es caballeroso y siempre busca una oportunidad para una nueva conquista. Esto no quita el amor que siente por su esposa. Es un hombre inteligente y cauto, es astuto para mentir y para hacer negocios. Tiene una envidia peculiar sobre su hermano menor que tiene habilidades artísticas, en cambio el solo tiene habilidades para negociar y engañar. Se autonombra Pan Wickham para sus conquistas y le molesta decir su verdadero nombre, en ocasiones solo se nombra como el señor del sombrero.

Historia y familia:
Hijo mayor de la familia Wickham-Mercier, con dos hermanos y una esposa. Sus padres lo consideraban el más brillante de los tres, sus habilidades financieras inigualables, todo lo que tocaba lo volvía oro.

-Historia:
Sus padres solían viajar debido a que su padre un empresario que escalaba los niveles de fortuna llegó a Francia, era primavera. La familia recibió a su primogénito, su padre lo educó con fervor para ser su sucesor. Tres años después nació su hermana. A los cinco años su madre le intentó enseñar su arte para que tocara el violín pero solo le salían tonadas desafinadas y toscas. Siempre había sido mentiroso y con el tiempo todos sus engaños los fue mejorando, algunas veces sus mentiras las volvía realidad.

Le encantaba mirar a su madre ejecutar el violín mientras comía galletas recién horneadas con té, junto con su pequeña hermana, pero un día venía alguien más en camino y su madre enfermó mucho, lo cual, al nacimiento de su hermano menor, la señora Wickham no pudo resistir y falleció. Ya no habían más violines y su hermana, así como el, ambos eran pésimos en ese arte. Siempre culpaba a su pequeño hermano Khárôn por la muerte de su madre y le miraba con recelo.

Después de algunos años, a pesar de todo se fue a estudiar a Paris, donde su padre había montado una consultora de bienes raíces, el y su hermana se dedicaron a levantar la empresa, mientras que Khárôn se dedicaba a sus cosas por otro lado. Su hermano había descubierto su habilidad con el violín, que por un lado envidió, puesto que tocaba idéntico que su madre. A pesar de todo veía por el, pues tenía la responsabilidad de cuidarlo aunque el, solo lo hacía por la promesa que le había hecho en el lecho de la muerte de la señora Wickham.

En un viaje de negocios conoció a Eve, era una noche de invierno en un tren. La nombró Bleu por su extraño gusto con el azul, esa noche no la dejó escapar con facilidad y conversaron hasta el amanecer, el se había maravillado de todo lo que hacía y decía. La mujer estudiaba artes en Paris y tocaba el violín. En un principio sería una de sus conquistas más, pero todo cambió cuando la escuchó tocar en aquel concierto de clausura. Eve se volvió parte de su vida y se volvió en su esposa. Para el era la mujer perfecta, guapa, noble, artista y fiel. Una esposa modelo que no cuestionaba nada de lo que el hacía. Por tal motivo pudo darle vuelo a una serie de infidelidades que cubrió con sus hábiles mentiras.

Una noche su hermano le llamó para que lo sacara de prisión, lo que pasaba constantemente por su afán de la vida alegre y espíritu libre, ignorando por completo lo que le hacía ser así. Él estaba feliz con su vida y siempre lo presumía orgullosamente. Le pidió que le hiciera un regalo a Eve, un violín, era un regalo especial para ella, que en el fondo era para parchar esa culpabilidad que sentía por engañarla seguido.

Las noches en la consultora se volvieron más largas y a veces de días. Las cuales, dejaba a Eve a cuidado de su hermano confiando ciegamente en que el la cuidaría y le solaparía su andanzas con otras mujeres. Pero un día cuando regresó de la “oficina” todo había cambiado, Eve estaba extraña y su hermano desapareció durante meses. Su amada esposa recayó en su depresión. Eve solo le pidió que no le dejara sola tantas noches y que se quedara, lo cual “prometió” y no cumplió. Khárôn volvió invitándoles a un viaje y pensó que era una buena idea para calmar sus aventuras y dedicarle más tiempo a su esposa que ahora parecía solamente un trofeo y para que se curara de aquella depresión que la seguía abrazando constantemente.

Esa noche mientras se preparaban para el viaje, Eve quería quitarse la vida, había conseguido un poderoso veneno de flores, uno que no dejaba rastros. Cuando estaba preparando la ropa de su esposo descubrió algunas cosas que no concordaban y una llamada telefónica de una mujer buscando al caballero del sombrero, confirmó sus sospechas.

Después de abordar el tren, mientras estaban en el camarote, Eve le pidió que le dijera la verdad y este le confesó todo lo que había hecho, por primera vez en toda su vida había dicho la verdad, la que terminó con su vida. Horas después de esta confesión y de que se hubieran tranquilizado las cosas, su esposa llamó a los paramédicos para que ayudasen porque no despertaba y Eve fue a buscar a Khárôn para darle la noticia. Cuando llegaron al camarote, los médicos lo dieron por muerto.

El roble fantasma le dio la oportunidad de volver, el cual su único objetivo es buscar a Azul para lograr su perdón. Sus recuerdos se limitan a su arrepentimiento, algunos flashes del vagón y en Azul. No recuerda a su hermano Khárôn, ni a nadie más de su familia. Nunca dejará sus hábitos, no le gusta la soledad, ronda por la villa y en el vagón en busca de conquistas y va entregando bombillas a los nuevos habitantes.

Se convirtió en un espíritu, un alma errante con raíces simbióticas en el Roble, un recuerdo olvidado, un pasado atormentado, una muerte anuncia, y el último de los tangos de Paris.

-Familia:
Eve Nobrega Wickham (Esposa): Maestra de música y artes plásticas.

Damien Wickham Dómine (Padre): Economista a cargo de la consultora de bienes y raíces Chez Donnez.

Dalila Mercier Chifflet (Madre-Fallecida): Violinista, ama de casa.

Eloïse Wickham Mercier (Hermana menor): Auditora contable, soltera.

Khárôn Wickham Mercier (Hermano menor): Violinista y actual maquinista del tren de medianoche.

Otros Datos:

-Nivel de adquisitivo: Alto, nunca se limita en nada, siempre tiene suficiente dinero en su cartera para pagar todo lo que se le venga en gana y cumplir cualquier capricho de sus acompañantes.

-Pertenencias: Llevaba un juego de maletas negras de cuero muy costosas, donde lleva ropa y artículos personales, de aseo y varios sombreros.

-Enfermedades: No.

-Antecedentes: Ninguno

-Manías o Trastornos: Mentiroso compulsivo. A la limpieza.

-Fobias: Ninguna.

-Gustos: Le encanta el bourbon y fumar su pipa por las tardes mientras su esposa toca el violín.


-Extra:

Religión: Católico, pero lo no practica demasiado.

Habilidades: Mentir y engañar. Negociar.

Deportes: Esgrima.

Mascotas: Ninguna.

Idiomas: Francés, Inglés, Portugués, Alemán, Español.

Estudios: Master en Economía Financiera y empresarial