Re: La niebla esconde cicatrices (Vagonero)

por **El Vagonero** Jue Jul 08, 2010 4:15 am

Khárôn suspiró al sentir la suavidad e intimidad de Azul sobre de él, puso atención a lo que le decía y una amplia sonrisa surcó su rostro. Se puso en pie siguiendole cual corderito domesticado, justo cuando iba a replicar, los labios de la centella lo callaron y él no hizo nada por evitarlo, le abrazó con suavidad y caminó hacia el interior del baño sintiendo la nalgada, sonrió y negó gustoso. Le esperó recargado sobre una de las frías paredes el baño, su mente estaba un poco en el exterior con los malditos cuervos y su maldito amo. Él no le temía pero sabía que Damien cuando quería ser peligroso lo lograba, le preocupaba lo que el roble le ordenara, suspiró y se quedó serió observando a Eve a través de una mirada perdida.

por **Azul** Jue Jul 08, 2010 4:29 am

Dentro de la ducha pasaron cosas que no puedo explicar, solo puedo decir que Eve cumplió lo que le dijo al oído a Khárôn para que luego salieran de la ducha más relajados, Eve se puso la ropa para dormir y le dio un pantalón de manta que ella misma había hecho para él. Le pidió que se quedara esa noche, quería que compartieran la misma cama y no solo para desahogar sus pasiones. Mientras el se ponía el pantalón ella cambiaba las sábanas y se hundió en ellas en espera de su amante. Cuando estuvieron los dos dentro de aquellas sedosas sabanas apagó la luz. Y ella le dijo:
-No recuerdo como Kaos llegó a mis manos, solo sé que me lo dio Pan –dijo con dolor- Pero detrás de Kaos hay algo importante, algo que se liga a mi vida pasada, y se que no tiene que ver con Pan, Kaos es una extensión de mi alma, si lo pierdo, si le pasa algo, algo me pasará a mi también –comentó con un poco de angustia- Como no sé la historia de este violín, he inventado muchas de ellas de cómo nació ese violín de color azul… y muchas personas me han regalado historias de el… tal vez usted podría hacer una…-le miró un momento en la oscuridad mientras su ojos se acostumbraban a las sombras- ¿Le gustaría aprender a tocar?

por **El Vagonero** Jue Jul 08, 2010 4:55 am

El vagonero quedó limpio y satisfecho de la ducha, una buena ducha con una buena compañía. Él no podía evitar sonreir embobado por aquélla dulce centella, le siguió en silencio y tomó el pantalón de manta que ella le había hecho. Se lo puso delante de ella y se quedó observandole ante la petición que Eve le hizo, le asintió con un ligero gesto de la cabeza y se metió en las suaves sábanas con ella. Escuchó con esperanzas de que recordara algo pero su desilución nuevamente llegó...ella no recordaba nada. Suspiró frustrado y agregó cuando ella terminó de hablar de Kaos Había una vez, una gran mujer que tocaba un poderoso violín, dicho violín tenía el nombre de Milen Scarlet o manzanita escalarta puesto que su sonido era tan dulce que los mismos dioses se conmovían. Cuando la frágil doncella ya no pudo tocar más, heredó aquél bello violín a su hijo menor para que éste siguiera con su legado.

El joven se enamoró de una mujer prohibida, no podía tenerle puesto que le pertenecía a otro. La dama tenía dedos ágiles y agraciados, tocaba exquisitamente y el joven enamoradizo supo que era su alma gemela. Al sentirle perdida quizo hacerle un regalo, uno que jamás olvidara y que llevara un mensaje oculto por parte del amante silencioso. Fabricó un violín para la joven, la mezcla de las maderas fueron exóticas: arce, pícea, ébano y jacaranda. Sólo 3 piezas poseían maderas distintas a ésa composición, el arco era de roble, el diapasón y la mentonera estaban hechas de cedro. Para darle un nuevo toque había mezclado cobalto con azufre y así fue como el violin fue barnizado, obteniendo el azul caracteristico de Kaos, como lo había llamado su creador. El arco fue cubierto por pequeños diamantes, dandole porte y belleza.

Ése violín llevaba el alma del hombre enamorado y frustrado por tener que dejar libre a la mujer prohibida. Había mutilado su propio violín para que tuviera una parte de él con ella, era la mejor forma para decirle que siempre estarían unidos... el vagonero le sonrió de manera amarga y le acaricio el rostro con sus toscas manos. Se quedó viendole fijamente y contestó su pregunta No...yo no sirvo para ésas cosas, mis manos no son las de un artista... se limitó a decir y su mirada avellana se quedó observando el techo de madera.

por **Azul** Jue Jul 08, 2010 5:20 am

Se refugió entre sus brazos mientras escuchaba la historia que le contaba el extraño hombre que por cada palabra que decía dentro de su pecho algo se movía, le sorprendía el hecho que había mutilado su propio violín para hacerle uno aquella mujer. ¿Pero quién era?... Kaos había pasado de historias a historias, pero definitivamente esta historia le gustaba mucho. Sería una de sus preferidas, la melancolía de no poder recordar el lazo de Kaos le aturdía demasiado.
-Me hubiera gustado escuchar a Milen Scarlet –comentó como si ese personaje fuera algo real, como si existiera en un mundo paralelo- tu historia es muy hermosa y no veo a Kaos de otra manera … podría encajar perfecto en todos los detalles que has mencionado –la acaricio el rostro hasta la barbilla, para luego darle un beso en los labios, tal vez el hombre no estaba a acostumbrado aquellos cariños, pero siempre había una primera vez, Eve era muy cariñosa y apasionada- parece que lo conocieras mejor que yo… ¿Tienes una relación con mi violín? ¡CONFIEZA! -rio por la broma, mientras se volvía apoyar sobre su pecho para escuchar su corazón- No sabía que Kaos hiciese amigos con facilidad… siento tristeza por el hombre… aunque si de alguna manera estaban unidos por la música, tarde o temprano se volverían a unir…-comentó de forma fantasiosa, aunque era una realidad ahora- Si puedes tocar… no pierdes nada con intentarlo Khárôn… ¿Alguna vez has estado casado o has tenido a alguien que te cuide y ame señor Khárôn?

por **El Vagonero** Jue Jul 08, 2010 5:37 am

Khárôn le sonrió sinceramente y comentó a lo que ella decía Tal vez alguna vez le escuches, cuentan en la villa que ése hombre toca de vez en vez...sobre todo cuando está triste...es cuestión de pillarle... dijo besandole la frente y regresó la mirada al techo. Cerró los ojos al sentir sus manos acariciando su barbilla y le devolvió un beso igual de tierno a Eve, aunque no estaba acostumbrado a todo éso, le gustaba que la centella lo tratara como alguien especial. No, no la tengo... contestó tajante sin que hubiera duda de ello, sonrió ligeramente ante los comentarios de la señorita Nobrega y se limitó a cerrar los labios para no dejar salir nada de más.

Asintió sobre "el reencuentro" de los amantes y acaricio toscamente con su pulgar los suculentos labios de Eve. Se encogió de hombros, él no quería demostrarle que podía tocar cualquier violín y en general cualquier instrumento de cuerdas. Temía que el roble se enterara y le hiciera algo a la centella, éso no podría soportarlo...era preferible no volver a tocar aquél violín escarlata a perderle de nuevo. Se quedó pensativo sobre que decir de su estado civil Mmm...no, no soy casado... dijo viendole fijamente y con seriedad Alguna vez hubo alguien que me amó pero tuvimos que separarnos por motivos ajenos a nosotros... dijo con tristeza y después se giró boca abajo pretendiendo adoptar una mejor postura, pero en realidad era un "no deseo hablar" del tema.

por **Azul** Jue Jul 08, 2010 6:07 am

Se perdía Azul en la mirada de Khárôn, le acariciaba debajo de las sábanas. Imagino al hombre tocando sobre las rocas de el castillo en ruinas. Sobre la bruma, con una lágrima en la mejilla.
-Estaré atenta para poder escucharle –dijo pensativa cerrando los ojos. Todas estas sensaciones de pareja hacía mucho tiempo que no las tenía y se sentía bien compartir con alguien, se sintió tranquila al saber que este hombre no tenía a nadie más, por alguna razón confiaba en el, y se preguntó quién era persona que lo había amado, si esta seguía en la villa o se había quedado fuera. Aunque en el pueblo se hablaban cosas horribles, pero nunca habían dicho que en Tartarus viniera alguna mujer. Sintió sus dedos sobre sus labios y ella solo disfrutó del aroma de lavandas y azafrán.

Ella quiso decirle que ahora estaba ella para cuidarle y si pasaba más tiempo junto a el pronto le amaría con tanta fuerza que no dejaría que nadie más lo tocase. Y así se quedaron juntos, compartiendo aquella cama, en silencio. Eve se acomodó a su lado abrazándole y dándole un beso en el hombro para luego conciliar ese reparador sueño, con una sonrisa en los labios y alejando aquella melancolía que le carcomía el alma.

FIN

por **Azul** Vie Jul 16, 2010 5:35 am

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